Sí, las cosas no van bien en
nuestro país; en efecto, desde hace tiempo. ¿Cuál es la novedad?
Hoy los escándalos políticos,
los problemas, la desgracia, el dolor, etc. dominan los espacios de los medios
de información y están generando desde hace tiempo la percepción de pesimismo o
desesperanza entre nosotros. ¿Qué hacer?
Todos estamos esperando
consciente o inconscientemente a que llegue alguien como Superman, el Hombre
Araña, Thor, Iron Man (o bien, el Santo o el Chapulin Colorado si se trata de
los iconos nacionales) o cualquier otro superhéroe del cine o de las novelas
que te guste o admires (hasta el Dr. House si quieres), y resuelva todos y cada
uno de nuestros problemas personales y nacionales: que atrape a los narcos y
secuestradores, que nos restituya lo robado y, de paso, encierre a los
diputados y a los malos gobiernos en la cárcel. ¿A poco no? ¡Claro! Y que
rescate a tu gatito del árbol también.
Sin embargo, eso no va a
pasar (es como esperar a Godot, ya
sabes, como en la obra de escrita por el inglés Samuel Beckett).
Por ello, las circunstancias
actuales nos llevan a dirigir mejor la vista a otra parte: ¡A ti! Sí, claro, a
ti. "¿Yo?" ¡Aja!
Antes, vamos por partes. ¿Sabes
qué es un héroe?
El diccionario virtual
Wikipedia dice textualmente:
"En la mitología y el folclore, un héroe (del
griego antiguo ἥρως hērōs) o
heroína (femenino) es un personaje eminente que encarna la quintaesencia de los
rasgos claves valorados en su cultura de origen. Comúnmente el héroe posee
habilidades sobrehumanas o rasgos de personalidad idealizados que le permiten
llevar a cabo hazañas extraordinarias y beneficiosas («actos heroicos») por las
que es reconocido". (http://es.wikipedia.org/wiki/Héroe
)
Bueno, me dirás: "¡Pero
yo no tengo poderes sobrehumanos!" Y yo te digo: ¿Y qué?
Si leíste bien, la
"Wiki" dice además "hazañas extraordinarias". Comprendo
perfectamente que no tienes una capa para volar, una telaraña, un mazo, un
antifaz o un "chipote chillón"; lo sé. Sin embargo, lo que sí tienes
es tiempo y talento que sí puedes usar para hacer cosas fuera de lo común,
fuera de lo normal, fuera de lo usual. Dirás ahora, "¿Cómo qué?"
¿Sabes? Empezar a hacer algo
"extraordinario" es hacer aquello que puedes hacer -pero hasta hoy no
has querido porque mentalmente te cansa (porque te exige cambiar tu rutina
diaria, romper con la costumbre, salir de tu comodidad, hacer un esfuerzo
extra, dejar atrás una actitud, modificar tu ruta, etc.). ¿Verdad que así es?
Pero modificar o cambiar así nada más eso no te hace ser un "héroe" o
"heroína" todavía.
¿Quieres saber qué te puede
hacer entonces un verdadero héroe o heroína? Pero lo más importante y primero: ¿Quieres
realmente serlo? Te aclaro que decidirte por serlo no es cuestión de fama o
vanagloria, pues si crees que así vas a tener por fin dinero, mujeres u
hombres, el BMW que soñaste, fama o iPad's... pues estás muy equivocado(a).
"Y si no quiero serlo", me contestas, pues no pasa nada; así es, ¡no
pasará nada de nada!
En la próxima oportunidad te
diré la neta: cómo ser un héroe si eres varón o una heroína si eres mujer, sin
importar edades, creencias, nivel socioeconómico o posición alta o baja en tu
grupo u organización.
Te dejo por ahora
reflexionar en lo siguiente:
Ser o no ser héroe o heroína
HOY ES CRUCIAL, URGENTE. Serlo en este mundo egoísta es UN DEBER INELUDIBLE DE
CONCIENCIA SI QUEREMOS SALIR DE LA CÁRCEL DE LA INDIFERENCIA, DEL DERROTISMO,
DE LA MEDIOCRIDAD Y DE LA DESESPERANZA.
Ser héroe o heroína es lo
que marca la diferencia, lo que te hará distinto(a), único(a) y te hará
trascender tu tiempo... es el camino a la trascendencia.
Twitter:
@HEROESHOY
@JaimeDuarte
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